Las leyes 'Anti-Trata' y de 'Prostitución Cero' no pueden terminar con los prostíbulos porque no tocan las redes de trata ni a los gobiernos proxenetas

Córdoba-Tucumán-Santa Fe-La Rioja -Santa Cruz: una “política de Estado”…  mientras siguen gobernando los proxenetas

Las leyes 'Anti-Trata' y de 'Prostitución Cero' no pueden terminar con los prostíbulos porque no tocan las redes de trata ni a los gobiernos proxenetas

Luego de la aprobación de la ley Anti-Trata de De La Sota se produjo “luz verde para clausurar 150 prostíbulos” (La Voz, 14/6) lo que llenó todos los diarios provinciales y hasta hubo polémicas con municipios que no querían adherir a la ley. El delasotismo presentó esto como una gran novedad, cuando la existencia de prostíbulos ya estaba prohibida por la ley de profilaxis a nivel nacional desde 1937.

A su vez, “Tucumán siguió los mismos pasos de Córdoba y, desde ayer, se convirtió en la segunda provincia en tener una ley que prohíbe los prostíbulos” (www.tn.com.ar, 16/8). El proyecto fue elaborado tomando como base una iniciativa anterior redactada por el diputado provincial Jesús Salim, diputado de La Cámpora, quien trabajó en su elaboración junto a Susana Trimarco, madre de Marita Verón, que ya había apoyado como decíamos arriba, el proyecto de De La Sota.

En Santa Fe, con el consorcio del PS-FAP, de Bonfatti, ya se dio media sanción a un proyecto del estilo de De La Sota. Se aprobó en diputados, y la propuesta fue de… el PRO provincial, encarnado por Alejandra Vucasovich.

Por último, funcionarios de Peralta en Santa Cruz, recientemente, dijeron que se empezará a discutir el punto, y en La Rioja, la fundación de Trimarco se reunió con Beder Herrera, el mismo que muy ocupado en aplastar la lucha de su pueblo contra la mega-minería, fingió verse afectado por la trata en su provincia y planteó avanzar próximamente con una ley a lo De La Sota.

La ley de De La Sota no ataca a los victimarios y no le da una solución a las víctimas

En realidad, la ley no sirve para terminar con los prostíbulos porque no desmantela todo el aparato más general que sostiene la prostitución (con centro en los cafishos pero con un entramado que llega al propio Estado y su Policía), y por otra parte, no da ninguna salida a quienes se encuentran en situación de explotación sexual como producto del tráfico de personas. Por ejemplo, la ley prevee el supuesto rescate de las víctimas, pero luego de esto, las compañeras subordinadas a los cafishos, según la ley de

De La Sota, no obtienen un plan integral de asistencia y contención, y la asignación del correspondiente presupuesto no está contemplada.

La pena prevista por la ley de De La Sota es una puerta giratoria 

La propia Voz del Interior, insospechada de ser opositora al gobernador de la provincia de Córdoba, delata que la Ley “Anti-Trata” de De La Sota funciona como una verdadera puerta giratoria. Por ejemplo: “el juzgado de Control de Rio Cuarto dispuso liberar ayer a Rubén Telmo Peruchini (59), dueño del ex cabaré (Le Nuit) que tras la nueva ley provincial contra la trata había reinaugurado como bar, en la ruta A005”. La Voz también pone de relieve la incongruencia entre la gravedad de los delitos y la precariedad de las penas que se aplican: “En el local que Peruchini había reabierto como bar, luego de que cerraran os cabarets de toda la Provincia, fueron rescatadas 14 mujeres, una de ella menor de edad y embarazada”, y aún así, Peruchini sólo fue condenado a 11 días de prisión efectiva (La Voz, 21/8).

Necesitamos organizarnos para terminar con las redes de trata y acabar con la explotación sexual

Recordemos que la ley de De La Sota fija como máximo 60 días de prisión por promover la prostitución en estos lugares y tan sólo se ocupa eventualmente de la clausura de locales. Como dijimos en El Piquetero N°2, Alicia Peressutti, miembro de Vinculos en Red, ONG organizadora del Congreso de Villa María contra la Trata, ha salido a apoyar la ley del gobernador de Córdoba y en esa misma línea se pronunció Susana Trimarco, la madre de Marita Verón. Pero al no desarmar las redes de trata ni el aparato represivo y delictivo que genera y garantiza la situación de explotación sexual, la clausura es un saludo a la bandera como muestra el ejemplo de Peruchini. 

Por eso, para enfrentar la confusión y la cooptación, desde Las Piqueteras planteamos que un paso concreto sería avanzar por medio de comisiones de mujeres en lucha para impulsar la investigación de los lazos de estos cafishos en cada barrio y pueblo, y así luchar por la cárcel a los tratantes y proxenetas, como a los miembros de la Policía y funcionarios del gobierno que después les permiten reubicarse bajo nuevas carátulas comerciales, y por la aparición de todas las mujeres secuestradas por redes de trata sobre la base de la apertura de todos los archivos.