Comunicado de Prensa de la TPR
Miércoles 1 de octubre de 2014
No es una “reforma con perspectiva de género”. Es una reforma pactada con la Iglesia Católica y con un contenido clerical, anti-obrero y anti-popular
Acto de Las Piqueteras en el Congreso:
¡Abajo la reforma reaccionaria del Código Civil y Comercial!
Consultada sobre el punto Daiana Asquini, dirigente de Las Piqueteras y de la Tendencia Piquetera Revolucionaria (TPR), declaró: “Lo primero que queremos dejar en claro es que esta reforma es una verdadera provocación al movimiento de mujeres en nuestro país y todo el continente. Al cumplirse tan sólo 3 días del Día por la Legalización del Derecho al Aborto en América Latina y el Caribe, el kirchnerismo se prepara a votar un Código Civil que constituye un ataque a las mujeres y, en particular, al derecho al aborto. Esto se ve con toda claridad en el artículo 19 que establece el inicio de la vida desde la ‘concepción’. Un término absolutamente ambiguo, que sustituye la redacción anterior donde figuraba ‘concepción en el seno materno o fertilización asistida’ y que es una afrenta ideológica al movimiento de mujeres que lucha por el reconocimiento no de ‘la vida’ en general sino de la persona humana como sujeto político y social desde el nacimiento. Esto fue reconocido incluso por organizaciones de mujeres y diputados kirchneristas que prometieron ‘la reforma de la reforma’ cuando llegue el proyecto a diputados. Nada de eso pasó. Ahora nos prometen que luego será modificado por leyes particulares. Quieren justificar lo injustificable mientras Cristina se abraza con Bergoglio. Se trata, por lo tanto, de un ataque frontal al derecho al aborto y a la fertilización asistida y una capitulación ideológica y política a la Iglesia Católica y la reacción política.”
En relación a qué pruebas o elementos tiene al denunciar un pacto político entre el kirchnerismo y la Iglesia Católica, la dirigente de Las Piqueteras afirmó: “Es evidente para cualquiera que quiera abrir el diario. Cristina se reunió con Bergoglio en Santa Marta el 20 de septiembre y, de la noche a la mañana, lanzó una ofensiva que en menos de 15 días lleva a que hoy estemos a punto de que aprueben el nuevo Código Civil y Comercial. Esto no sólo lo afirma Clarín sino que la modificación del artículo 19 ya había sido denominada por Página 12 como el ‘efecto Bergoglio’. También lo reconocen no sólo diputados kirchneristas como Jorge Rivas sino incluso opositores de la UCR que, por su acatamiento a la Iglesia Católica, votarán a favor y en disidencia con su bloque. Bernardo Biella, diputado de la UCR, sostuvo que votará a favor de la reforma ya que es una ley ‘a favor de la vida y en contra del aborto ya que considera que hay vida desde la fecundación’. A su vez, como hiciera Onganía en 1968, el nuevo Código le otorga a la Iglesia Católica el status de ‘institución de bien público’, es decir una institución con la que el Estado colabora financieramente. No por nada el obispo de Chascomús, monseñor Carlos H. Malfa expresó que ‘la Iglesia no negocia ni muchos menos presiona, sino que ejerce con libertad su irrenunciable servicio a toda la sociedad en la fidelidad a Dios y a la dignidad humana’ mientras que el monseñor Arancedo ‘consideró fundamental la definición legal del comienzo de la existencia de la persona en el nuevo Código, que al igual que el anterior indica que comienza desde la concepción, sea dentro o fuera del seno materno. Desde ese momento hay vida humana y debe ser protegida sin importar las circunstancias’. No por nada la senadora de ultraderecha Liliana Negre de Alonso decía el 20 de noviembre de 2013 que rechazaba el dictamen del gobierno… salvo en la cuestión referida al artículo 19. Por lo tanto, desde Las Piqueteras decimos: ‘el que quiera ver, que vea’. Nos delimitamos de la impostura de numerosas diputadas kirchneristas que votaron a favor de la reforma del código declarándose en contra del artículo 19. Es al revés: el artículo 19 retrata de cuerpo entero la naturaleza reaccionaria de la reforma kirchnerista. Denunciamos que el kirchnerismo planteó que se vote en bloque para evitar la crisis interna de su propio bloque con numerosos artículos reaccionarios como el artículo 19. El pacto entre Cristina y la Iglesia Católica y su contenido reaccionario está a la vista de todos”.
A su vez, en relación al carácter anti-obrero, anti-popular y a favor de la impunidad, Asquini señaló: “Esta reforma no sólo ataca a la mujer sino al movimiento obrero y popular en general. Respecto a los aspectos anti-obreros puede nombrarse el artículo 963 que violenta la prelación del derecho laboral debilitando la prioridad del trabajador frente a la patronal, el artículo 1520 que elimina la responsabilidad de las empresas principales en los casos de tercerización, el artìculo 1251 afecta el concepto de remuneración dándole ese carácter al contrato de locación -lo cual es una forma de precarización laboral- y el artículo 1746 que ataca el derecho a la indemnización integral por la vida del trabajador limitando el reclamo al salario o lucro cesante. Y el carácter anti-popular de la reforma se verifica en la eliminación del derecho al agua, el ataque a los pueblos originarios, la creación de la Sociedad Anónima Unipersonal -que es aún más trucha y a la medida de las maniobras del capital que las propias sociedades anónimas- y, sobre todo, en lo que luego se votó como Ley de Responsabilidad del Estado que es exactamente lo inverso: una ley de irresponsabilidad donde el Estado y sus funcionarios se blindan de cualquier responsabilidad civil ante terceros. O sea la impunidad para el Estado proxeneta, narco, precarizador y asesino como se vio en la masacre de Cromañón o con el choque en la masacre de Once. Se trata de una reforma a la medida del Rodrigazo que coinciden en aplicar contra los trabajadores tanto el gobierno kirchnerista como la oposición patronal. Por todas estas razones, desde Las Piqueteras y la Tendencia Piquetera Revolucionaria rechazamos la reforma reaccionaria del Código Civil y Comercial”.
Por otra parte, en relación a lo actuado por la oposición patronal y el Frente de Izquierda, la dirigente de Las Piqueteras y la TPR declaró: "Tanto la propaganda oficialista como opositora han ocultado un hecho insoslayable que sólo la izquierda denunció: la oposición patronal está a favor del contenido reaccionario de la reforma kirchnerista. Como declaró el propio Ricardo Gil Lavedra en Clarín, ‘la visión general del proyecto arroja un resultado positivo’ y, más claro aún, ‘nadie puede poner tampoco en duda la notable labor de la Comisión de Juristas que redactó el anteproyecto, consultando a otros expertos y recogiendo la voz de los autores y de los jueces. De igual modo, es digna de encomio la labor de la Comisión Bicameral que recorrió el país para escuchar todas las opiniones’. Entonces, desde Las Piqueteras y la TPR preguntamos, ¿de qué oposición nos hablan? Solamente se oponen a la reforma kirchnerista porque quieren aplicarla ellos mismos después de 2015. Por eso concentran su crítica en tecnicismos legales y se cuidan mucho de denunciar el contenido concreto de la reforma. De ahí el error del Frente de Izquierda que, en un hecho aberrante, acompañó con su firma la declaración de los bloques opositores contra el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez. Desde Las Piqueteras y la TPR señalamos que la firma del FIT no tiene nada que hacer junto a la de Massa, Macri y FAUNEN. Lejos de constituir algún tipo de crítica socialista, la política del FIT ha sido acoplarse a la campaña de la derecha firmando su nota parlamentaria. Por el contrario, como TPR y Las Piqueteras, pensamos que la izquierda no tiene que confundir sus banderas con la derecha y la centroizquierda pro-imperialista ni por un segundo porque no defendemos los mismos intereses y su crítica a la reforma es absolutamente circunstancial. Por eso no es casual que el FIT haya esperado hasta el último día para convocar a marchar al congreso, como lo veníamos reclamando desde Las Piqueteras. Por eso tampoco es casual que en su intervención en el Congreso Pitrola, diputado por el PO, no haya dedicado ni una sola palabra a criticar a la oposición pro-imperialista y Del Caño, diputado por el PTS, se haya delimitado de la oposición patronal sólo para destacar los ‘aspectos positivos’ de la reforma - un verdadero guiño al kirchnerismo. De una u otra forma, el FIT ha terminado entrampado en la polémica entre los partidos patronales. Contra la adaptación y parálisis del FIT, llamamos a poner fin a esta situación y lanzar una campaña política unitaria de la izquierda y los luchadores por la derogación de la reforma reaccionaria en oposición al kirchnerismo, la Iglesia Católica y la oposición pro-imperialista”.
Para finalizar, Asquini dedicó sus últimas palabras a convocar la agenda de actividades que realizarán en las próximas semanas: “Desde Las Piqueteras venimos desarrollando una campaña nacional por el NO a la reforma reaccionaria, y así como luchamos contra su aprobación, llamamos al FIT, a la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto y a todas las luchadoras a pelear por su derogación y su no aplicación, ni en 2016 ni en ningún otro momento. Como hicieron las luchadoras en España, logrando derribar la intentona anti-abortista del gobierno de Rajoy, las mujeres en la Argentina tenemos que plantarnos e impedir semejante atropello contra nuestros derechos. Convocamos al movimiento de mujeres a dar una enorme lucha en este sentido. Con esta perspectiva convocamos al Pre-Encuentro de Mujeres que realizaremos en el Barrio Charrúa este sábado 04/10 a las 14hs en Charrúa 2890 e invitamos a todas las compañeras a viajar con nosotras al XXIX Encuentro Nacional de Mujeres que se realizará el 11, 12 y 13 de octubre en Salta”.
Contacto:
Daiana Asquini - (011) 156 335 9278
Natalia Saralegui – (011) 154 070 4885
Secretaría de Prensa de la TPR
TENDENCIA PIQUETERA REVOLUCIONARIA
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